Traté de hacer a mi bien tú bien, y ves bien que me salió mal ...
A veces Marte y Venus se llevan mal, no es cuestión de maldad, es duro
aprender a amar y acá estoy despidiéndome, mascando tu rencor, lo sé. No me
quedo más que aceptar, soy tan culpable como vos. Yo también deje de regar la
flor de la superación. Comprender, aceptar. Prometiste cuidarme sin importar y
hoy ya no importa mi bienestar, lo importante es tu ansiedad. Regió mi vida al
azar una vez ¿sabes? No me gusta apostar, siempre me tocó pagar. Yo me propuse
superar tu ausencia a pesar del dolor. Vos preferís no analizar, seguís en
busca del amor.